Hace unos días apuntaba en mi twitter una frase del premiado y reconocido Manuel Castells: "Lo más interesante de cualquier transformación tecnológica es lo que la gente hace con ella”, humildemente, para completar este post yo añadiría: "sí se lo permitimos". En mi puede sonar presuntuoso (cómo "friki" le sonó a aquél a quién le sugerí twittear su evento...), pero si lo escuchamos en boca de Tim Berners-Lee, el fundador de la World Wide Web en el Parlamento Europeo hablando sobre "Una web libre, y abierta para todos", si somos sensatos, prestaremos atención. Internet tiene mucho más que ver con la experiencia que se le da al consumidor más que con la tecnología, lo interesante es lo que la gente puede hacer: comunicarse, crear comunidades, intercambiar ideas, crear contenido (…).
Si existiera la posibilidad de que desde alguna iniciativa pública se valorara la posibilidad de apoyar a empresas en el desarrollo de plataformas e-learning 3D (mundos virtuales), cómo asesora independiente, indicaría que los Mundos Virtuales existentes en la actualidad se muestran como redes controladas, con contenidos protegidos y con clientes que pagan por esos contenidos y servicios, y aunque existen desarrollos en algunos MUVEs que integran aplicaciones web, su carácter predominantemente es cerrado y centralizado.
En el Metaverso, entendido como la convergencia de una realidad física, virtualmente aumentada y un espacio virtual físicamente persistente (Metaverse Roadmap Overview, 2007)- para aproximarnos al concepto de Metaverso y tener claro a lo que NO se refiere, consultar parte de la presentación del taller que realicé en Virtual Educa 2009 Buenos Aires- todas las plataformas deberían abrirse entre ellas y los usuarios para confluir con el espíritu original de Internet y las posibilidades que nos ofrece.
¿Diseñas páginas web o ofreces soluciones web? No tenemos nada más que mirar un poco hacia atrás en la historia de Internet y a los primeros negocios (Compuserve, Microsoft Network, AOL ...) frente al modelo de Google. Lo más característico de Internet es su carácter abierto y descentralizado. Los protocolos y estándares que la conforman fueron diseñados expresamente para construir una red con esas características. Y, aunque la Web 2.0 permite que el usuario "prosumidor" además pueda desarrollar sus propias aplicaciones (mashups), y por ende podamos incluir las mismas de forma creativa en los procesos de aprendizaje tal y cómo propuse en la presentación "Formación creativa: de las recetas a la formación conceptual" bajo la temática Escuela Futuro y, ejemplifico con algún caso práctico cómo el mostrado en el último Expoelearning 2008 "Mashups. Aplicaciones educativas de los mundos virtuales", el peligro reside en lo que esta sucediendo con las redes sociales y dentro de la Web 3D en los Mundos Virtuales, cada una y uno de ellas y de ellos, requiere de un registro. Lo importante es que el usuario pueda actualizar su perfil en distintas redes sólo con acceder a una de ellas, eliminando barreras. ¿O no? No estamos hablando de disponer de un correo electrónico en google, hotmail, yahoo o bla, bla, bla... o un blog en blogger o en wordpress o bla, bla, bla... Cualquier desarrollo Web debe tener en cuenta la necesaria adaptación a un crecimiento desmesurado, marcado por la heterogeneidad de formatos del contenido y variedad en los dispositivos de acceso.
"La Internet del futuro supone la transformación de la Red en una base de datos que permita hacer los contenidos accesibles por múltiples aplicaciones", Tim Berners-Lee dixit, y gracias a tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA), las aplicaciones geoespaciales, la realidad aumentada o la Web semántica, tridimensional y, muy probablemente síguiendo las últimas tendencias, pilotos e informes al respecto, todas ellas integradas.
Pues sí, las últimas novedades en e-learning pasarán por la Web pero, no tienen por qué ser el centro de las mismas. La incorporación de tecnologías, más o menos conocidas o más o menos novedosas, no son garantia ni de éxito, ni de innovación, ni de creatividad. De momento, no digo más.
Volviendo a nuestro tema específico, más allá de un listado de posibles capacidades funcionales de la plataforma de Mundos Virtuales, cualquier desarrollo debería fundamentarse en la esencia de la propia web, garantía de su éxito: sencillez y democratización. Por ende, el éxito de los Mundos Virtuales dependerá de factores cómo la estandarización, plataformas de código abierto, comunidades activas de prosumidores y la solución integradora de servicios que se ofrezcan a través de estos. En nuestro sector, el e-learning, no tenemos nada más y nada menos que fijarnos en la evolución de las plataformas, tal y cómo indiqué en la presentación "Metaverso Educativo. Un viaje al pasado para entender el presente e intuir el futuro" en Virtual Educa Zaragoza 2008.
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